*San Sireno de Sirmio 🌿* Originario de Grecia, se trasladó a Sirmio (hoy Sremska Mitrovica, Serbia), donde trabajaba como jardinero. Su martirio se debió a un incidente en el que reprendió a una mujer noble que paseaba por su jardín con actitudes consideradas inapropiadas. Ofendida, la mujer lo denunció a las autoridades romanas. Fue arrestado y llevado ante el gobernador, quien primero lo declaró inocente de insultar a la mujer, luego le exigió renunciar a su fe cristiana y ofrecer sacrificios a los dioses paganos. San Sireno se negó rotundamente, confesando su fe con firmeza. Como castigo, fue decapitado.