Saludos, con la realización este domingo de la feria agropecuaria fue el marco propicio para percatarnos de que la misma es el principal hecho socio económico y cultural del territorio. Así afirman no sólo las autoridades competentes sino además los pobladores. Pero hay elementos que bien podrían imprimirle otros aires acertivos, los precios de determinados productos y la legalidad de los que allí concurren. Caminando por la avenida de expendio, se observa variabilidad de ofertas que van desde la venta de vegetales, viandas, carnes, pescado de mar y agua dulce, zapatos, plantas, artículos diversos para el hogar, enlatados, encurtidos, artesanía y hasta etcs. En la feria de este domingo primaron dos grandes opiniones, el arroz desaparecido del lugar y el engaño al consumidor, problemas inherentes a todos los que allí concurrimos. Como mismo se siembran otros productos de alta demanda, una mirada diferente le debemos dar a las cebollas y los ajos aún con precios atmosféricos. Afirman pobladores que la feria logra concentrar, recaudar, moviliza patrones de mercado y comprueba que la legalidad por el bien de nuestra economía debe primar. Al tema feria volveremos.