😈 Relatos Eroticos / Erotismo Y Sensualidad 🔥
😈 Relatos Eroticos / Erotismo Y Sensualidad 🔥
February 2, 2025 at 09:10 AM
“Médico de Pueblo” 🖤 Capítulo (35) Reconozco que fueron correctas y atentas, pero cuando me podían mirar a mí sin tapujos, su lenguaje corporal se volvía muy agresivo conmigo. Yo estaba perplejo, nunca antes las había visto perder tanto los nervios, sobre todo conmigo. Estaban muy alteradas, joder...pero si conocían de sobra la visita de Montse, yo mismo se lo había dicho el mismo día del telegrama. - ¿Se puede saber que os pasa a las dos...he dejado impotente a algún parroquiano sin darme cuenta y era amante vuestro? Por favor...estoy hasta las cejas de mierda en estos momentos, solo me falta que os pongáis vosotras también en mi contra.- Se lo dije a Simona mientras la cogía del brazo. - Fede, eres como un niño pequeño, que rabia me da a veces ver lo inocente que puedes llegar a ser, parece mentira que seas tan listo para según que cosas y tan...mejor me callo, déjame ahora, tengo trabajo, ya te lo explicaré luego. – Se soltó con algo de brusquedad y se fue gruñendo por el pasillo. Volví a reunirme con mis invitadas, cada vez estaba más nervioso. - Bueno Federico, debo reconocer que el interés personal de Montserrat por ti está más que justificado, tiene buen gusto la condenada. – Me quedé flipado escuchándola, hablaba el castellano con acento argentino, pero gramaticalmente era muy correcto. Supongo que mi cara de sorpresa la hizo reír. - Gracias por el cumplido, pero soy yo quien está disfrutando de la compañía de mujeres bonitas, por cierto, tu castellano es muy bueno Margaret. - Mi nombre completo es Margaret Rodríguez, mi padre es argentino y mi madre de la costa oeste. Menos mal que no me has criticado, sino... estabas perdido. – Se puso a reír con demasiado entusiasmo, el vino de Cariñena estaba comenzando a hacerle efecto y se le empezaba a trabar algo la lengua. Cuando ya íbamos por el postre, la pelirroja, con una sonrisa en la boquita que le llegaba de oreja a oreja, se dedicaba a beber con bastante ansia. Su mirada estaba ya tan vacía como la botella de vino que reposaba junto a ella - Margaret, guapa...vigila, este vino es fuerte y se sube con rapidez a la cabeza, sobre todo si has comido poco. Estás algo chispada, es mejor que los sorbos los acompañes con un poco de alimento. – Me miraba concentrada, como solo lo sabe hacer un borracho que intenta disimular su estado. Mientras yo le soltaba la parrafada, picoteó con los dedos, creo que más por el efecto de mi comentario que por el hambre que pudiese tener. - Os han preparado una habitación muy acogedora y vuestras maletas están ahora allí. Cuando queráis...podéis iros a dormir, supongo que el viaje en coche ha sido largo y cansado. - Para nada Fede, lo hemos hecho en cinco días y hemos aprovechado para hacer algo de turismo y conocer la gastronomía del país. Estamos bien... ¿no quieres que duerma en tu habitación? Que poco tardó en disparar a matar. Directa y sin rodeos, como siempre. Si en ese momento claudicaba, volveríamos otra vez a las andadas. Me miraba con algo de ansia esperando mi respuesta. - Montse, creo que es mejor que antes tengamos una larga conversación tú y yo sobre todo lo que ha estado pasando durante este tiempo. Además, no vas a dejar sola a tu amiga esta noche, creo que le está cogiendo demasiado gusto a la viticultura. La pelirroja estaba bastante ausente, empezaba a notar que su cabeza pesaba más de lo habitual y decidió aguantársela apoyada en su brazo, nos miraba a los dos con cara de sueño y fingida atención. - Tenemos tiempo de todo si al final somos capaces de aclararnos. Creo que es lo mejor. – Vi que no le había gustado nada mi negativa, pero al mismo tiempo intuí que no se iba a dar por vencida con tanta facilidad, menuda era Montserrat. Si la veías retroceder, es porque pensaba tomar impulso para saltar de nuevo. Una hora más tarde me tuve que ausentar, había una urgencia en el dispensario. Un vecino había decidido dejarse parte de las nalgas pegadas en el asfalto de su calle. La mobilette quedó siniestro total, estampada contra una fuente gótica. Me dediqué a limpiarle y curarle las heridas, al piloto aficionado se le caían unas lágrimas como puños de grandes. Lo reconocí, era un capullo bebedor y mal educado que acostumbraba a tener un comportamiento poco digno con mis rumanas favoritas en particular y con cualquier mujer bonita en general. Le habían tenido que parar los pies en varias ocasiones. En una de ellas, solo mi intervención evitó que Valeria probara la resistencia del rodillo de cocina estrellándoselo contra su cráneo. Después de eso, no volvió a vérsele más por la fonda, si lo vuelve a pillar Valeria...seguro que no se escapa de unos cuantos puntos de sutura, no veas la mala leche que gastaba mi niña .Y ahora...mira por donde, aquí lo teníamos, con el culo en pompa y unas heridas que debían hacerle rabiar de dolor. Eso creía el, pero aun se podía rabiar mucho más, vaya que si, yo se lo demostraría en unos minutos. Joder...como iba a disfrutar contándoles la movida a mis amigas. - Procure no moverse, esto le va a escocer un poco. – El fulano me miró con cara de "estoy cagao de miedo". Dejé en la repisa el suave e indoloro Betadine, en esos momentos mi mirada era más la de un niño a punto de hacer una trastada que la de un doctor ejerciendo responsablemente su profesión. Cogí con una sonrisa perversa la tintura de yodo. Total, lo iba a desinfectar igual de bien, pero en vez de sentirse en medio de un vals, con la tintura, iba a ponerse a bailar rock duro. Continuará… Autor: CROME
❤️ 👍 9

Comments