Toda crisis representa también una oportunidad. Bolivia, cuya dependencia del Sol Peruano ya empieza a hacerse crónica, ha decidido a rematar sus reservas de oro; en buen cristiano, el gobierno boliviano está vendiendo el país a quien lo ayude a salir de la crisis. Dicho eso, si el gobierno del Perú tuviera sólo un poco la ambición y agudeza que tiene Trump a la hora de sentarse a negociar, podríamos aprovechar el desastre económico de otrora "Alto Perú", para reforzar nuestro poder económico, geopolitico, y porqué no, incluso cultural. Cuestión de ser más ambiciosos. https://vm.tiktok.com/ZMkpEo8GK/