La espera se acorta, la llamada a la conversión resuena en nuestros corazones, y Nuestro Señor de la Caridad ya se encuentra revestido para recibir el tiempo santo que se aproxima. Su mirada serena nos invita a la reflexión, a la preparación del alma, al encuentro con Aquel que, con su amor infinito, nos guía hacia la verdadera vida. Aún no ha comenzado la Cuaresma, pero su sombra ya se extiende sobre nosotros, recordándonos que es momento de disponer nuestro espíritu para vivirla con fe y humildad. Que el Señor de la Caridad nos ayude a caminar hacia ella con el corazón abierto, dispuestos a acoger el misterio de su entrega. Que su presencia nos inspire y su imagen nos hable al alma. Vestidor🪡🧵y fotografía 📸: Jesús Fernández Hidalgo #señordelacaridad #dulcenombre