Había una vez, en la era feudal, un hanyō solitario que fue rechazado tanto por los demonios como por los humanos. No tenía un lugar al que pertenecer y estuvo sellado durante 50 años por el cruel destino. De repente, una chica del futuro llegó a su vida y lo liberó de ese sello. Una vez más, el destino quiso que, debido a una joya destrozada en cientos de fragmentos, el hanyō tuviera que formar equipo con esa chica. Los días pasaron, convirtiéndose en meses, haciendo que esa jovencita calara hondo en el maltratado corazón del hanyō. Hasta que, al final, la chica se volvió lo más importante para él, convirtiéndose en su hogar. El tiempo siguió pasando, y él terminó enamorándose de la muchachita del futuro. Sus sentimientos fueron correspondidos de la misma manera. Sin embargo, el destino les tenía preparada la última prueba para su amor: tres años, tres largos años separados el uno del otro. Tres años que fueron una tortura para ambos. Pero, una vez más, lograron superarlo para volverse a unir en la era feudal. Desde ese día, nunca más se separaron. Vivieron su amor en plenitud y felicidad. Tanto amor dio sus frutos, permitiendo que aquel solitario hanyō al fin tuviera una familia, tal como lo desearon sus padres: su propio hogar. Fin.... Crédito de la bella ilustración a la talentosa artista Ángel Kagome. Aquí les dejo sus enlaces para que vayan a darle mucho amor a su hermoso arte. Pagina 😘👇 Angel_Kagomex X 😘👇 Échale un vistazo a 🌸~𝓐𝓚~🌸 (@Angel_KagomeX): https://x.com/Angel_KagomeX?t=Dg3pxO2RZLhxmqcS23Vv3g&s=08