George Alberto Silva Montes, una de las cuatro víctimas de la masacre registrada la tarde del domingo 8 de junio en una vivienda de la manzana 1230 del bloque 10 de Bastión Popular, en el norte de Guayaquil, habría sido previamente amenazado por extorsionadores. Esta sería la principal causa del ataque armado que dejó un saldo de cuatro personas fallecidas Únicamente Silva Montes tenía antecedentes penales por asociación ilícita. Fue detenido en el año 2017. “El hermano de una de las víctimas manifestó que se encontraba en su domicilio cuando recibió una llamada desde el número de su hermano. Al contestar, uno de los autores del crimen le dijo: ‘Ahí queda tendido tu hermano’. Entonces salió junto a su padre hacia el lugar donde sabían que estaba, y al llegar encontraron el cuerpo con múltiples heridas, tendido dentro de la vivienda”, relató un investigador. La casa donde ocurrió el ataque era propiedad de Christian Meza. Su madre indicó a los agentes que su hijo trabajaba en una ‘chiflería’ y que ese día se encontraba en su jornada de descanso. El teniente coronel René Cañar, jefe del distrito Pascuales, informó que tras el crimen fue detenido un sospechoso, quien sería uno de los presuntos responsables del múltiple asesinato. “Este detenido es uno de los sicarios que participaron en el hecho. Fue capturado en el sector sur de la ciudad”, explicó el oficial. En la escena del crimen, personal de Criminalística levantó al menos 16 vainas percutidas y 6 balas deformadas, todas calibre 9 milímetros Cayeron la mujer y el hijo de alias Ñoco La madrugada del domingo 8 de junio, policías del distrito Pascuales aprehendieron a cinco personas (tres hombres, una mujer y un adolescente) durante el allanamiento a una casa en el bloque 2 de Bastión Popular, en el norte de Guayaquil. En el lugar incautaron cuatro fusiles de largo alcance, 21 cartuchos de diferentes calibres, cuatro alimentadoras (cargadores) y tres motocicletas robadas. El oficial René Cañar informó que entre los detenidos hay dos ciudadanos de nacionalidad venezolana. “Presumimos que los fusiles decomisados pertenecen a alias JK y que estas personas estaban encargadas de custodiar el armamento al servicio de la banda criminal conocida como Los Tiguerones. Además, se encontraron motocicletas robadas”, indicó el jefe policial. Según Cañar, se investiga la participación de alias JK, alias Ñoco, alias Colombia y alias MK, identificados como líderes de células criminales de nivel intermedio que operan en el distrito Pascuales. “Los Tiguerones y Los Águilas siguen actuando libremente en este sector. Son disidencias de otras estructuras delictivas que se disputan el control territorial”, agregó el teniente coronel. Asimismo, confirmó que la mujer detenida (de nacionalidad colombiana) y el adolescente aprehendido serían la pareja e hijo de alias Ñoco, quien fue víctima de un atentado armado el pasado 29 de mayo en una discoteca de Bastión Popular, hecho que dejó dos muertos y ocho heridos.