A veces la vida no tiene sentido. Los planes se desmoronan, el corazón duele en silencio, el camino por delante parece borroso y nada parece que esté funcionando. Pero haz una pausa, solo por un momento, y recuerda esto, Yusuf (عليه السلام) fue traicionado, pero tuvo su trono Musa (عليه السلام) Huyó con miedo, pero le condujo al discurso divino. Maryam (عليها السلام) estaba sola, pero dio a luz a un milagro. Ayyub (عليه السلام) perdió todo, pero ganó la alabanza de Allah. Los chicos de las cavernas fueron exiliados, pero su historia se conservó para siempre en el Corán, recordándola cada viernes. Yunus. Fue tragado por la ballena, pero se levantó perdonado. El profeta Muhammad SAW fue rechazado por su propio pueblo, pero los ángeles fueron enviados en su ayuda. Uhud parecía una derrota dolorosa, pero se convirtió en un punto de inflexión para la Ummah. El Tratado de Hudaybiyyah parecía una pérdida, pero fue declarado una victoria por el propio Allah. *Nada es aleatorio. Ni los retrasos, ni el desamor, ni siquiera el silencio. Todo está escrito con un propósito. Cada herida es una puerta, cada contratiempo un paso adelante disfrazado.* Lo que parece una caída puede ser tu ascenso en la fabricación. *Lo que parece el final puede ser solo el principio.* Así que si hoy es pesado, si todo lo ves complicado, si no encuentras una salida, solo debes saber que Allah no te ha olvidado. Tu historia aún se está desarrollando. Y está sostenido en las manos más misericordiosas. Que cada dolor que llevas se convierta en paz, y que cada corazón que espera sea dotado de más de lo que oró.🤍