Del camino depende el destino. “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte.” Proverbios 14:12 Hay muchos caminos para terminar perdido, pero hay un solo camino para ser salvo. Ese es el camino del que hoy te hablo. Es fácil pensar que lo que nos toca vivir es resultado del destino, de la casualidad, de algo que debía pasar, como si fuéramos marionetas, como si no pudiéramos decidir. Pero yo creo que, en realidad, cada día tenemos la oportunidad de parar, pensar, recalcular y corregir. Sin embargo, muchas veces seguimos con nuestro diario vivir, dejándonos llevar por la misma corriente en la que estamos, sin pensar cuál será el puerto final al que llegamos. Es terrible pensar cuántas personas llegan a confundir el resultado de sus malas decisiones con el destino que debían seguir. Yo no creo que el destino final esté escrito en el sentido de que estemos obligados por una fuerza sobrenatural a hacer algo en particular. No creo que unas personas ya estén marcadas para el infierno y otras para el cielo. Creo que a todos se nos da la oportunidad de escoger. De lo contrario, no tendría ningún sentido que Jesús viniera al mundo. Si no existe la oportunidad, si no es posible para el perdido encontrar el buen camino, entonces todo lo que dice la Biblia no tiene sentido. Yo creo firmemente que Dios ama al mundo, ama las almas, y está ofreciendo a todos la oportunidad de reconciliarse, de hacer las paces. Pero la gente está mirando para otro lado. No se interesan. Están preocupados por tener los bolsillos llenos, dinero en el banco, comida en el estómago, vacaciones de lujo, un auto nuevo… Pero no se detienen a pensar que su vida puede terminar hoy mismo. Muchos han interpretado mal la soberanía de Dios, enseñando que todo ya está predestinado, que hay quienes no se salvarán simplemente porque así ha sido establecido. Pero Dios no obliga a nadie a hacer lo que no quiere hacer. Él es soberano, sí, pero también es justo y amoroso. Y en su soberanía eligió darnos libertad real para decidir. Esto lo expresó claramente a su pueblo Israel cuando les dijo: “A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia.” Deuteronomio 30:19 Y este mismo principio fue reafirmado para todos los pueblos, no solo para Israel: “Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres.” Tito 2:11 Por eso debes entender lo siguiente: “Dios… ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan.” Hechos 17:30 El mensaje está claro: hay una invitación universal. Dios no hace acepción de personas. Él ofrece vida, pero tú debes escogerla. Jesús dijo que Él es el Camino, y lo expresó muy claramente para que lo siga toda la gente: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” (Juan 14:6) Así que si ahora sientes que te has desviado, si te das cuenta de que has confundido el resultado de tus decisiones con un supuesto destino ineludible, todavía estás a tiempo. Hoy puedes dar un paso de fe. Detente. Mira tu vida. Piensa en tu eternidad. No estás atado a lo que fuiste ni a lo que hiciste. Jesús vino justamente para darte la posibilidad de un nuevo comienzo. Él abrió el camino. Solo necesitas responder a su llamado. “He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.” 2 Corintios 6:2 Puedes escribirme, dejar tu pregunta, tu comentario. Estaré dispuesto a responder. Si puedo ser de ayuda, estoy dispuesto a ayudarte. No sé todas las cosas, pero conozco al que sí las sabe. Te abrazo con el alma. Gerwuer ⛵️ https://whatsapp.com/channel/0029VafoYw11dAvySUGHya2W