16 de Mayo 𝙋𝙪𝙚𝙨 𝙡𝙖 𝙫𝙞𝙨𝙞𝙤́𝙣 𝙨𝙚 𝙧𝙚𝙖𝙡𝙞𝙯𝙖𝙧𝙖́ 𝙚𝙣 𝙚𝙡 𝙩𝙞𝙚𝙢𝙥𝙤 𝙨𝙚𝙣̃𝙖𝙡𝙖𝙙𝙤; 𝙢𝙖𝙧𝙘𝙝𝙖 𝙝𝙖𝙘𝙞𝙖 𝙨𝙪 𝙘𝙪𝙢𝙥𝙡𝙞𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙤 𝙮 𝙣𝙤 𝙙𝙚𝙟𝙖𝙧𝙖́ 𝙙𝙚 𝙘𝙪𝙢𝙥𝙡𝙞𝙧𝙨𝙚. 𝘼𝙪𝙣𝙦𝙪𝙚 𝙥𝙖𝙧𝙚𝙯𝙘𝙖 𝙩𝙖𝙧𝙙𝙖𝙧, 𝙚𝙨𝙥𝙚́𝙧𝙖𝙡𝙖; 𝙥𝙤𝙧𝙦𝙪𝙚 𝙨𝙞𝙣 𝙛𝙖𝙡𝙩𝙖 𝙫𝙚𝙣𝙙𝙧𝙖́. 𝙃𝙖𝙗𝙖𝙘𝙪𝙘 2:3 Así dice el Señor tu Dios: Aférrate a la esperanza y no te pongas de acuerdo con las mentiras del enemigo. Yo estoy contigo en la espera, en la lucha y en el silencio. Aunque la batalla se haya intensificado, no es señal de derrota, sino evidencia de que se están moviendo montañas y se está abriendo camino para el avance de Mi Reino en tu vida. Elige levantar tu mirada hacia Mí. Magnifícame a Mí por encima de las circunstancias, porque ellas cambian… pero Yo no. Yo Soy el mismo ayer, hoy y por los siglos. No te rindas, no cedas a la desesperación. Aun en el aparente retraso, Yo estoy obrando. Mis promesas para ti siguen en pie, y se cumplirán a su tiempo, que es Mi tiempo perfecto. Estoy justo a tiempo. El Tribunal está sentado, y los libros están abiertos. Este es tiempo de oraciones respondidas, promesas cumplidas y juicios favorables. Mantente vigilante, alinea tus palabras con las Mías, y no te unas al enemigo con declaraciones de derrota. Hay sentencias de victoria esperando ser soltadas por tu clamor y tu fe activa. Yo he visto tu llanto. He sentido tu cansancio. Pero hoy te digo: tu llanto se convertirá en gozo. Como la mujer que da a luz y olvida el dolor por la alegría del nuevo nacimiento, así te sorprenderé con Mi fidelidad. Te llenaré la boca de risa, y en tu boca habrá un nuevo cántico. No mires lo que ves, mira lo que Yo he dicho. Lo que Yo he hablado, se cumplirá. ¡Levántate! ¡Cree! ¡Camina! Porque ciertamente, todo lo que te prometí lo verás con tus propios ojos. 𝘾𝙤𝙣𝙫𝙚𝙧𝙩𝙞𝙨𝙩𝙚 𝙢𝙞 𝙡𝙖𝙢𝙚𝙣𝙩𝙤 𝙚𝙣 𝙙𝙖𝙣𝙯𝙖; 𝙢𝙚 𝙦𝙪𝙞𝙩𝙖𝙨𝙩𝙚 𝙡𝙖 𝙧𝙤𝙥𝙖 𝙙𝙚 𝙡𝙪𝙩𝙤 𝙮 𝙢𝙚 𝙫𝙚𝙨𝙩𝙞𝙨𝙩𝙚 𝙙𝙚 𝙖𝙡𝙚𝙜𝙧𝙞́𝙖. 𝙎𝙖𝙡𝙢𝙤 30:11 𝙉𝙑𝙄