Tantra, una antigua tradición espiritual originaria de la India, puede ser muy útil para abordar problemas como la insatisfacción sexual, la falta de orgasmos y la disminución del interés sexual. Aunque a menudo se asocia con prácticas sexuales, el Tantra en su esencia es un enfoque integral que busca la conexión profunda entre cuerpo, mente, energía y conciencia. Aquí te explico cómo puede ayudar con esos aspectos específicos 1. Insatisfacción sexual El Tantra se enfoca en la conciencia plena del cuerpo y la experiencia sensorial. Esto puede ayudar a: • Salir del piloto automático en el sexo y vivirlo como una experiencia consciente, no como una meta (como el orgasmo o la penetración). • Reducir expectativas y presión de rendimiento, lo cual permite disfrutar más del proceso que del resultado. • Explorar nuevas formas de placer: el Tantra enseña que hay muchas zonas erógenas más allá de los genitales y muchas maneras de experimentar placer (energético, emocional, sensorial). 2. Falta de orgasmos Muchas veces, las dificultades orgásmicas tienen causas emocionales, psicológicas o simplemente por falta de conexión con el cuerpo. El Tantra ayuda a: • Reconectar con el cuerpo: a través de respiración, meditación, movimiento y tacto consciente. • Liberar bloqueos emocionales que pueden estar impidiendo el goce (por vergüenza, culpa, traumas o creencias limitantes). • Expandir el concepto de orgasmo: en el Tantra, el orgasmo no es solo genital. Puede ser energético, de corazón, incluso espiritual. Se aprende a tener múltiples tipos de orgasmos 3. Pérdida de interés sexual Esto puede estar relacionado con estrés, rutina, desconexión con la pareja o uno mismo. El Tantra propone: • Cultivar la energía sexual (kundalini) a través de prácticas respiratorias, movimiento pélvico, visualización y masaje. • Redescubrir el deseo sin presión: a través del juego, la curiosidad, la presencia y el tacto amoroso. • Crear rituales de intimidad, donde el sexo no sea solo físico, sino también una conexión emocional y espiritual. Prácticas tántricas útiles: • Respiración consciente (para mover la energía sexual por el cuerpo). • Eye gazing (mirarse a los ojos con presencia). • Masajes tántricos (para desbloquear energía y despertar la sensibilidad). • Meditación en pareja (para generar conexión y presencia). • Tacto lento y consciente (reaprender a tocar y a recibir placer). El Tantra no “cura” mágicamente los problemas sexuales, pero ofrece un camino de exploración profunda, amorosa y consciente que puede transformar la forma en que vives tu sexualidad. Es especialmente poderoso para quienes desean reconectarse consigo mismos y con su energía vital desde una perspectiva más sensible y espiritual.