Carlos Baliño López (1848-1926), fundador del Partido Comunista de Cuba y símbolo de la lucha por la justicia social y la independencia de Cuba. Su legado une dos siglos de resistencia y visión revolucionaria. 📜 Breve historia de un titán Nació en Guanajay el 13 de febrero de 1848. Tras dificultades económicas y la prisión de su padre, emigró a EE.UU. en 1869. Trabajó como tabaquero en Cayo Hueso y Tampa, donde fundó gremios obreros como los Caballeros del Trabajo y periódicos como La Tribuna del Pueblo, defendiendo los derechos laborales y la libertad de Cuba . En 1892, en Cayo Hueso, suscribió las bases del Partido Revolucionario Cubano (PRC) junto al Apóstol. Acompañó a Martí en giras por Florida, recaudando fondos y movilizando a la emigración cubana para la independencia . Tras regresar en 1898, denunció los abusos económicos y fundó el Partido Obrero (1904), luego Partido Obrero Socialista. En 1906, cofundó el Partido Socialista de Cuba, fusionando fuerzas marxistas. Dirigió publicaciones como Lucha de Clases y apoyó la Revolución Rusa de 1905 . En 1922, conoció a Julio Antonio Mella mientras corregía pruebas de la revista Juventud. Juntos, en agosto de 1925, crearon el primer Partido Comunista de Cuba, uniendo el pensamiento martiano con el marxismo-leninismo . 🌟 Su legado vivo - Puente entre generaciones: Fidel Castro lo llamó "el enlace directo entre el Partido de Martí y el primer Partido Comunista" . Su vida refleja la unidad entre la independencia nacional y la emancipación obrera. - Periodismo revolucionario: Usó la pluma como arma en más de 10 publicaciones, desde El Productor hasta Espartaco, siempre al servicio de los trabajadores . - Ejemplo de perseverancia: Murió el 18 de junio de 1926, a los 78 años. El Boletín del Torcedor escribió: "Los trabajadores de Cuba han perdido a uno de sus mejores militantes" . Carlos Baliño merece ser recordado como el hombre que unió a Martí y Mella, soñando con una Cuba libre y justa. Su roble sigue en pie. > "Bueno es amar a la Patria, pero mejor es amar a la libertad y la justicia". > — Carlos Baliño