☥ Templo de Neftis ☥: Iván González Cuando España cayó ante el Islam estaba hundida y dividida por el cristianismo. La identidad pagana multicultural y multirracial de los pueblos de Hispania había sido quebrada, poco quedó de esas grandes culturas que fueron el origen de España. La identidad cultural ha de ser recompuesta y para ello hay que socavar los cimientos del cristianismo, el mayor obstáculo para la supervivencia de la nación española. Tenemos que recordar y no olvidar nunca que los primeros reyes de Hispania fueron paganos. La lucha religiosa acabó con la unidad de Hispania conseguida con la romanización, el cristianismo hizo temblar al Imperio Romano, hundido desde las catacumbas por el proselitismo cristiano. Los paganos no eran ateos y fueron conversos forzosos al cristianismo, lo que produjo desencanto, desculturización y socavó la unidad hispanorromana. La herejía monoteista sólo tiene tres milenios, el paganismo vive desde hace eones. Roma no cayó, cayó el paganismo, y llegaron los sucesores de Pedro a desenraizar el paganismo de lo más profundo de los corazones del Imperio. El cristianismo realmente es simple desculturalización, esas masas católicas no practicantes y desconocedoras de la biblia son en el fondo profundamente ateos aunque defiendan el cristianismo. El cristianismo es el causante de la solidaridad con los extranjeros, la invasión masiva y la sustitución étnica de la población que ocurre desde hace siglos. Los católicos son hispanistas, aceptan las razas mestizas sudamericanas y al resto de católicos del mundo de otras razas. Iván González