🔴 *El Ayuntamiento de Getxo asume su incapacidad para garantizar la seguridad en la noche de San Juan y pide a los ciudadanos no acudir con objetos de valor ni teléfonos móviles.* La celebración de San Juan en Getxo se ha ido consolidando como un evento cada vez más reglado, más vigilado y, también, más despojado de su carga simbólica popular. Entre advertencias de seguridad, eufemismos institucionales y programas 'familiares", parece que el fuego que un día representó renovación y liberación se enfría en medio de discursos técnicos y decisiones políticas que desdibujan el alma de la fiesta. Las actividades principales se concentrarán en la plaza San Nicolás de Algorta y están organizadas fundamentalmente por asociaciones locales del ámbito del "feminismo", el euskera o los que están a favor del acogimiento de personas indocumentadas como San Nicolás Zabalik. También habrá celebraciones paralelas en Malakate y Zubilleta. Más allá del programa festivo, el Ayuntamiento ha aprovechado la convocatoria para lanzar una serie de advertencias que reflejan la cara menos amable de la noche de San Juan: los robos y altercados en la vía pública, especialmente en las playas. En este sentido, se vuelve a pedir a la ciudadanía que no acuda con objetos de valor ni teléfonos móviles, una recomendación que, más que solución preventiva, parece asumir de antemano la incapacidad institucional para garantizar la seguridad en estos espacios. La Policía Local y la Ertzaintza anuncia que incrementarán su presencia en zonas sensibles y se vigilarán especialmente las hogueras no autorizadas, el consumo de alcohol por menores y otros comportamientos sancionables. Protección Civil también ha sido movilizada para coordinar los actos que incluyen fuego, y desde el Ayuntamiento se insiste en el carácter “libre de violencia machista” que debe tener toda fiesta pública.