
༆꧁𝐌𝗒 𝐠𝖺𝗋𝖽𝖾𝗇.
February 23, 2025 at 03:50 PM
Promesas de venganza.
Prefiero que no se cumplan tus promesas de venganza,
Y que, al final, aunque no quiera, yo me quede sola aquí.
¿De qué me sirve aún tener divina añoranza?
¿De qué? ¿De qué sirve si nunca me hará feliz?
Miradas, ¡miradas! Y no miradas vacías, miradas juzgadas.
Me juzgan con odio porque ellos no son como yo.
¿Ser diferente es suficiente para ser detestada?
¿Por qué se ponen en mi contra? ¿Les hice algo hoy?
No me importan las palabras de los demás, sino las tuyas.
Prometiste venganza porque, en algún momento, fuiste igual a mí.
He construido una coraza, formada de lo que ayer juras,
Lo que ahora prevalece en mi sangre color carmín.
En mis memorias has quedado, y te recuerdo.
Tanto lo hago que ahora pensarte me hiere,
Tanto me he obsesionado que ahora me pierdo,
Tanto te he llorado que mirarte me duele.
Prefiero que no se cumplan tus promesas de venganza,
Y que, al final, aunque no quiera, yo me quede sola aquí.
¿De qué me sirve aún tener divina añoranza?
¿De qué? ¿De qué sirve si nunca me hará feliz?
Juraste no dejarme sola, que estarías a mi lado.
¿Hace cuánto fue tu promesa? ¿Cuánto ha pasado?
¿Cuándo es que me besas? ¿Cuándo me apartas?
Ahora ya ni me piensas, confíe de manera equivocada.
A Dios le pedí que me conteste, entre tantos ruegos.
Me dijo que mis ojos eran todo lo que necesitaba.
¿Los necesito si con el amor ellos se vuelven ciegos?
¿Me serán útiles si sé que no verán tus jugadas?
Me aferré a tu cuerda, por más rota que estaba.
No sé decirte cuál era peor entre la cuerda y yo.
Las manos, ¡mis manos! Degolladas, desangradas,
Sufriendo por tus rosas, aquellas del corazón.
Prefiero que no se cumplan tus promesas de venganza,
Y que, al final, aunque no quiera, yo me quede sola aquí.
¿De qué me sirve aún tener divina añoranza?
¿De qué? ¿De qué sirve si nunca me hará feliz?
Dijiste que no te irías, pero veo tu lugar y no estás.
Dijiste que me amarías, pero tu amar no fue real.
Soporté tus espinas, pensando que me darías tu amor.
“Joven se mata a sí misma” titular frío del periódico.
Te hice daño, ¿te hice daño? ¿Por qué la dañada fui yo?
No me diste violencia, aunque te guarde rencor.
Ten clemencia y misericordia de este maldito ser,
Dios me ha abandonado, no tengo ni su querer.
No habrá nadie dispuesto a sufrir por mí,
Mejor agarro mi mochila y veo a dónde llego.
¿Dónde iré mañana? ¿Qué lugar no conocí?
Iré a donde la muerte enseña a vivir a los muertos.
Prefiero que no se cumplan tus promesas de venganza,
Y que, al final, aunque no quiera, yo me quede sola aquí.
¿De qué me sirve aún tener divina añoranza?
¿De qué? ¿De qué sirve si nunca me hará feliz?
Oh, querido señor, hoy tan solo tengo trece años.
También mis labios tienen trece años, y no dicen palabras.
¿Usted cree que es tiempo de tropezarme con peldaños?
Sería más fácil caerme de manera desesperada.
La desesperación se hace con mi mente,
La apodera, la domina y, finalmente, la mata.
¿Era tiempo? ¿Era hora? No lo tengo muy presente,
Pero, si algo sé, es que ahora no soy nada.
Bécquer dijo que el alma podía hablar con los ojos.
Mi alma es muda, vendió el derecho de hablar hace tiempo.
Por eso ahora escribo, grito entre dichos insonoros.
¿Cuál será el día en el que todos se den cuenta de lo que siento?
❤️
🐁
💗
💛
🤍
🩵
8