*NO APAGUES TU LUZ* No te arrepientas de ser quien eres. Tu forma de amar, de soñar y de vivir te hacen único. No te avergüences de tu corazón noble ni de los sueños que acaricias, porque todo eso es parte del propósito que llevas dentro. Has aprendido a caminar en silencio, esquivando las piedras que otros lanzan. Tu paz incomoda, pero tú no vives para complacer al mundo. Vives con autenticidad, con un alma pura que nadie puede tocar… porque tu vida le pertenece solo a Dios. La historia que llevas escrita está llena de batallas. Has recibido golpes que no todos conocen, y aunque las sombras han intentado derribarte, siempre ha habido una mano divina que te ha sostenido. Te aferras a Él no por miedo, sino porque sabes que nunca te fallará. Dentro de ti hay una llama que no deja de arder. Una luz que, aunque pasen las tormentas, sigue brillando más fuerte. Y cuando miras al cielo, en medio de todo, ves un rostro que sonríe: es tu Padre. Porque el verdadero hogar no es un lugar… es estar donde Él está. *No apagues tu luz por miedo a incomodar. Sé fiel a ti, camina con fe, y nunca olvides que el cielo te acompaña. 🌟*